La historia se repite. Fuera
telarañas.
Todos alguna vez hemos
experimentado esa sensación extraña de sentir una telaraña sobre tu cabeza al
cruzar un campo o agacharte en un desván. Sólo quieres librarte de ella pero no
sabes cómo. Algo así creo que nos ocurre a
muchos herculanos. Miramos la clasificación y vamos segundos.
A falta de 5
partidos vemos la promoción de ascenso cerca. La ilusión es indudable. Pero una
telaraña nos perturba la cabeza.
Porque vamos segundos sí, pero en la
clasificación de los 14 partidos de la segunda vuelta que marca la tendencia
vamos séptimos y equipos como At Baleares, Badalona, Espanyol y Ebro nos
superan en puntos.
Y Si nos fijamos en la cifra de goles en contra, en la
segunda vuelta no somos los menos goleados. Nos superan Baleares, Badalona,
Ebro y Teruel.
Y paradójicamente en cuanto a goles marcados hemos mejorado. Ya
casi alcanzamos los paupérrimos 16 de la primera vuelta y con 14 vamos los sextos tras Barça B, Espanyol B,
Villareal, Cornellà y Teruel.
Es decir llevamos una segunda vuelta para media
tabla. ¿Y por qué entonces vamos segundos? Sencillamente porque salvo el
Baleares, ha habido una gran irregularidad en un montón de equipos y nosotros,
tira que te va, nos hemos mantenido mínimamente regulares: el resultado: ahí
estamos aspirando a todo.
Y claro. la telaraña no se nos va
de encima. Y todos, desde los sesudos comentaristas hasta los aficionados de a
pie. Desde los que vemos los partidos hasta los que los comentan en tertulias
de oídas, que todos tenemos nuestro corazoncito, hacemos nuestros diagnósticos
ponemos y quitamos jugadores, entrenamos
virtualmente y pontificamos, como ocurre
y ocurrirá desde que el mundo es futbol. Para muestra vale un botón.
Ocurrió hace 84 años. El 17 de Marzo de 1935. El Hércules
jugaba la liguilla de ascenso a Primera División por primera vez en su historia.
Se enfrentó a nuestro visitante de hoy, Sabadell, en Bardin. Vencimos 4-0. Vean,
vean lo que decía la abundantísima prensa local de entonces.
¿Sabéis cómo acabó la cosa?
Ascendimos a Primera.
Quedan cinco. Así que fuera telarañas amigos. A muerte
partido a partido. Me da que cuando ocurren situaciones como la actual de sí
pero no, terminamos ascendiendo y fundiendo
todas nuestras filias, fobias y ansias en el amor incondicional al
Hércules.
¿Dónde? En Luceros naturalmente. Macho el Hércules.